En trabajos de topografía se hace imprescindible conocer bien el mundo de los RPAS para elegir el dron y el sensor más adecuado dependiendo del terreno y el objetivo a conseguir. Un operador bien equipado contará con drones multirrotor y drones de ala fija, lo que garantizará poder cubrir cualquier tipo de superficie, de prácticamente cualquier extensión. La óptica utilizada es vital. Cuanta mayor sea la calidad del sensor, mejores serán los resultados obtenidos.
Utilizamos drones que cuentan con posicionamiento RTK (Real Time Kinematic) que nos permiten conseguir precisiones con un error inferior a 1 cm.
UN PASO MÁS ALLÁ EN TOPOGRAFÍA CON DRONES
En topografía tradicional, el profesional va marcando puntos relevantes a una distancia aleatoria. Lo habitual es hacer un punto cada 25-50 metros, con lo que el software que se utiliza en estos procesos interpreta que todo es recto entre punto y punto. Con los drones este error desaparece ya que considera un punto cada 2-3 cm dependiendo de la resolución. De esta forma los errores son inferiores al 0,5%, lo que hace que sean desestimados. En este sentido también hemos de resaltar la cantidad de superficie que es posible estudiar en un día: mientras que con técnicas tradicionales de topografía la superficie a supervisar en una jornada oscila entre 150-200 Ha., utilizando drones podríamos alcanzar las 1.000-1.300 Ha en un solo día.
APLICACIONES EN TOPOGRAFÍA
Canteras y minería
Mediciones de acopios, cálculo de volúmenes, movimientos de tierras, mapas de elevación, curvas de nivel…
Construcción
Levantamientos topográficos y modelos digitales de terrenos, distancias, perfiles de terreno, obtención de ortofotografías, áreas, nubes de puntos …
Obra civil
Mantenimiento de carreteras, infraestructuras ferroviarias, mapas de líneas eléctricas, seguimiento de obras…
Actividades catastrales
Obtención de planos para gestión y/o planificación territorial, obtención de información para actualización del catastro…